domingo, 1 de enero de 2012

LAS LEYES LIBERTAD

Alción Editora publicó Las Leyes Libertad en l993. Casi veinte años después no me atrevo a tocar nada de lo que entonces escribí, y esta aparente sumisión es también una ley de la libertad: acordar con una elección anterior.

Daniel Vera

LAS LEYES LIBERTAD i

Dedicatoria
En memoria de Luis López Legazpi, para quien la libertad era condición de todas las posibilidades.

LAS LEYES LIBERTAD ii

Prólogo

Si tiene libertad,
ninguna ley. No ser
voluntad de poder.
¿Por qué fatalidad
tiene que ser verdad?
Quiere. No quiere. Sabe,
por augurio de ave,
no saber. Pero muere.
Ser enigma prefiere.
No revelar su clave.


a

Soberana belleza.
Peligroso destello.
Te toma del cabello.
Te corta la cabeza.

b

¿Qué perfecta venganza
le dio vida y olvido
y ser de no haber sido?
¿Quién la llamó esperanza?


LAS LEYES LIBERTAD iii

Cinema

Cada tiempo es espejo
móvil de eternidad.
Platón y su verdad
con inverso reflejo
en ardua trama dejo.
Ya no cabe esperanza
sino, más bien, semblanza
de gesto incierto y ciego
que ayunta tropo griego
con angustia y tardanza.

a

Once I loved a rabbit.
Now, she is a toon.
Now, I am a word.
We are blank and silence.

b

Sola lección de abismo:
Sin yo ni tú: nosotros:
Sin él y sin los otros:
Eternidad: Lo mismo.

LAS LEYES LIBERTAD iv

Dios, dioses

Nombra primera vez
lo que antes nadie nunca...
Frase dócil y trunca
descubre candidez
de lenguaje: Doblez.
Dice "nombro". No nombra,
sólo engaña y asombra.
Se atreve a preguntar:
¿Qué sería nombrar
entre sombras la Sombra?

a

Quizás fueron amores
vencidos por la trama
del tiempo. Si los llama,
¿los quiere vencedores?

b

Con ídolos figura
imágenes en calma
de consuelo sin alma.
La tragedia perdura.

LAS LEYES LIBERTAD v

Mediterráneas

I

Por orígenes, nada.
Por fines, hombre muerto.
Camino mi desierto
con carne deslumbrada
por luz enamorada
de mujer. Desatino
se reduce: destino.
Nada. Muerte. Y en medio
palabras con asedio
de tenue amor marino.

a

Lejos mar y tan lejos
de cielo cuánto mar
mira y mira mirar
cielo y mar: sus espejos.

b

Memoria de María.
De tal vez y quizás
no recuerdo. ¿Qué más?
Mares de me-moría.

LAS LEYES LIBERTAD vi

II

Leopoldo Lugones

De lejano, profundo
mar, celeste metáfora
de galaxia y anáfora
de cielos. En su mundo
redondo pero inmundo,
ínfimo se ilumina.
El poeta camina
como un escarabajo
y mira desde abajo
del mar la luz marina.

a

En orillas de mar
alguna canción llora,
pero otra se enamora.
¡Quién pudiera llorar!

b

Arena y sol. No más.
La muerte, siempre terca,
las palabras acerca.
Y ella viene detrás.


LAS LEYES LIBERTAD vii

Intempestivas

i

No seré en el futuro
ni he sido en el pasado.
Pisaré lo pisado
sin pausa y sin apuro.
Por instante maduro
de presente, decido.
Si no seré ni he sido,
soy no ser. Por ahora,
algo más no se ignora.
Nadie ha sido aludido.

a

Las leyes libertad
no prohiben sentido
y son lo prohibido:
Su posibilidad.

b

Posibilidad. Quiero,
si puedo, voluntad
de querer. Por mitad
me alegre desespero.

LAS LEYES LIBERTAD viii

Intempestivas

ii

Lo que no es tiempo, pasa
también por tiempo, como
si gravedad de plomo
hiciera de su raza
seres de varia traza,
incluso celestiales.
Pero si manantiales
de quietud o fulgor
brevísimo de amor
son tiempo: ¿Qué otros males?

a

Ayer. Penas recuerdo.
Mañana. No imagino.
De no hacer mi camino
hoy, otra vez me pierdo.

b

Regresará, tal vez,
con otra melodía.
Y no estaré ese día.
Y tampoco después.

LAS LEYES LIBERTAD ix

Intempestivas

iii

Ya tarde, casi viejo,
me enamoró una sombra
cuyo nombre la nombra
con rigores de espejo.
Adverso, no me quejo
de edades ni de estado,
porque tiempo es pasado
dejando su presente.
No tiene amor ni siente
por él ningún cuidado.

a

No regresa alegría.
Acaso nunca llega.
Es algo que se niega
con dolor cada día.

b

Como relación trunca
de amor que es amor arde
se dice: nunca es tarde.
Y tarde será nunca.

LAS LEYES LIBERTAD x

Intempestivas

iv

Si el poeta envejece
-calidad de precario-
se vuelve solitario
y su voz estremece
cada sombra que crece.
Día tras día tema,
pero es noche su emblema.
En luz descubre el arte
sólo mínima parte
de sombrío poema.

a

Envejecer. Morir.
Apenas otra cosa.
Porque un día, una rosa,
y otro día, partir.

b

El cuerpo, sin embargo,
tienta menos, quizás,
que el alma: ella jamás
quiere pasar de largo.

LAS LEYES LIBERTAD xi

Pie menor

Pequeña melodía.
Versos de pie menor
tendenciosos de amor
y de melancolía.
Tiene filosofía:
Piensa que metro breve
hace también más leve
su condición de pena.
Pero pesa, condena
cualquiera que se lleve.

a

Arenas amarillas.
Relojes sin horario
discurren solitario
fervor de redondillas.

b

Días y meses: años.
Tiempo. Miro por dentro.
Su sentido no encuentro.
Sólo ritmos extraños.




LAS LEYES LIBERTAD xii

Wer redet, ist nicht tot

a Susana Romano

Palabras. No morir
una y mil noches más.
Y ninguna capaz
de amar, ser o vivir.
Se puede sonreír
y contemplar desierto
mil veces y una. Cierto.
Suerte de Scherezada
repito en otra nada.
Quien habla, ya está muerto.

a

Te prometí, mi amada,
hacer un monumento.
Cuento la historia, cuento
las sílabas. Y nada.

b

Hablar no significa
vivir. Es más o menos.
¿Son ámbitos ajenos
y ninguno se explica?


LAS LEYES LIBERTAD xiii

Certeza paradoja

Seguro. Ya no dudo
ni sueño estar despierto.
No puedo no estar muerto.
No respiro. No sudo.
Soy ciego. Sordo. Mudo.
La palabra me arroja
certidumbres y aloja
todo este hablar difunto.
Ya sé. Ya no pregunto.
Me encarno paradoja.

a

Fragmento de certeza.
Minúscula mesura.
Fórmula de locura
o quizás de belleza.

b

En paradoja muestra
de manera muy clara
que, ni común ni rara,
la verdad es siniestra.


LAS LEYES LIBERTAD xiv

Lumbre

De lejos llegan voces.
Transcribo. No conozco
De tanto rumor hosco
fin ni origen. ¿Son dioses
o demonios atroces
que dibujan en-sueño?
Enigma no pequeño
y ajeno mi destino
de cifrarlo. Camino
por llamas y soy leño.

a

Palabra o verbo, pero
no término: el azar
me define. Contar
con otro dios no espero.

b

Amor a lo lejano.
A lo desconocido
por razón y sentid0.
Pasión: no ser humano.


LAS LEYES LIBERTAD xv

Anfibología

Entre dos disciplinas:
ésta de amor, emblema,
y aquella, de poema.
Figuras asesinas
o formas cristalinas
de dolor y de muerte.
Mi voz en pena advierte
ninguna diferencia,
amor, entre tu ausencia
y llanto que se vierte

a

En amor y escritura
cabe toda delicia.
La lectura, caricia.
La caricia, lectura.

b

En amor y escritura
cabe toda la pena.
La lectura, condena.
La condena, lectura.


LAS LEYES LIBERTAD xvi

A batallas de amor, campos de pluma

Si me encuentras, te encuentro.
Jazmín o rosa negra,
lo que somos, se alegra.
Nuestras lenguas, un centro,
dialogan por adentro
cada una de otra. Suma
voz cada voz. Espuma
de luz y luna vana
y alondra, la mañana
pace en campos de pluma.

a

Mucho mejor tenerte,
sería, que esperarte.
De ahí que en-amor-arte
cuando te toma, acierte.

b

Toma el todo por parte
y la parte por todo
y cree de ese modo
poner en amor arte.


LAS LEYES LIBERTAD xvii

Olivas

Olivas tales hechos
mejores que primeras:
de piernas y caderas
a vigorosos pechos.
Si con tiernos acechos
de mano dan en boca,
otra boca provoca
fulgurante saliva.
Explosión. Letra viva
por textura barroca.

a

Mujer de tez oliva
de ¿qué sueño? despierta.
Lleva mi letra muerta
sueños de letra viva.

b

Suave piel avanzaba
con olivas de nieve.
Y luego un beso breve
glaciares incendiaba.


LAS LEYES LIBERTAD xviii

Vísperas

Vísperas. Deliciosa
solicitud de espera.
Verdad toda quimera.
Prodigio cada cosa.
Noche de luna y rosa
mañana ya habrá sido.
Después de sucedido
y muy lejos del sueño,
mausoleo pequeño
para laurel y olvido.

a

Sueño contigo yo
antes de venir tú.
Sueña conmigo tú
antes de partir yo.

b

Es mejor ser olvido
que laurel. Nada más
deseo que esa paz
de no ser algo sido.

LAS LEYES LIBERTAD xix

Más acá de la muerte

Memoria de lejano
amor que por ser tanta
ya no recuerda: canta.
¿Y el amor? Un arcano.
La noche de verano
sueños extraños gesta
y hace de sombras fiesta
y fuego. Desolado
reclama mi costado
¿a quién? una respuesta.

a

Junto con otras doce
semejanzas de tiza
misterios de ceniza
y ave Fénix conoce.

d

Cenizas han brotado.
Misterioso trofeo
y anhelante deseo
de polvo enamorado.


LAS LEYES LIBERTAD xx

Actualidad

Esperanza donada
por época concisa:
Destierro de la risa.
Ante varia mirada
sólo un paisaje: nada.
Meras operaciones
de tristes ilusiones.
Y ninguna alegría.
Grave monotonía
gris. Decoloraciones.

a

Orden: Polvo y ceniza.
Y desorden: Tragedia.
Mejor una comedia
y MORIRSE de risa.

b

Por eterno retorno
dioses -y también hombres-
se hacen olvido: nombres
y prácticas de adorno.


LAS LEYES LIBERTAD xxi

Todo, menos la canción

Bruma brama y en broma
resuelto corazón
de naipe de cartón
tiembla como paloma
y a risa se lo toma.
Corazón de baraja
prepara su mortaja
de azar o lo que fuere
y paloma se muere
de cartón en la caja.

a

Entonces su palabra
dice -y suena profundo-
que vida, dios y mundo
son un abracadabra.

b

La risa como purga
utiliza al final
-eco del carnaval-
una lejana murga.


LAS LEYES LIBERTAD xxii

Metafísica

Sin humor ni sentido
la razón metafísica,
flaca, frágil y tísica,
no quiere ser olvido
ni nada divertido.
Porque, en fin, ¿qué divierte
sino aquello que advierte
con voz menos que seria
la irrisoria miseria
de ser para la muerte?

a

Juramento de eterno
amor será cumplido
por no ser exigido
después de algún invierno.

b

El humor de sentido
fino, y también el burdo,
se muestra en el absurdo
del ganado perdido.



LAS LEYES LIBERTAD xxiii

Virtudes

Risa, tal vez, o llanto
Humor de cementerio.
Nada grave ni serio.
Y por amor, espanto
que rima con mi canto.
Sombra ni luz alumbre
senda de pesadumbre.
Costumbre, si virtuosa,
leve, alegre y graciosa.

a

Se conoce su oficio
corruptor: poesía
ofrece, y alegría,
pero no beneficio.

b

Hábitos aburridos
para nada geniales.
Y otros, también banales,
pero más divertidos.


LAS LEYES LIBERTAD xxiv

Libertad

Libertad de ninguna
ley o leyes precisa.
Más bien, cosa de risa
y mirada de luna
deja que su fortuna
cumpla con mano ciega
la negación. Y niega
la voz del opresor.
Es mujer, y en amor
alguna vez se entrega.

a

¿Libertad prisionera?
Con ignorancia grande
la confusión escande
Fin y Causa Primera.

c

Que sea libertino
si no puede ser libre
y en su música vibre
cumpliéndose el destino.